En el caso de que ya tengas tu novela o tu proyecto cinematográfico terminado, podrás acceder sin ningún impedimento a nuestro departamento de corrección ortotipográfica y de estilo. La idea es que tu libro, tu película o serie quede perfecta para llamar la atención de los lectores y de los productores.
 
La corrección ortotipográfica se centra en eliminar los errores ortográficos, tipográficos y gramaticales. Busca ajustar el texto a unas normas determinadas: las de la RAE, las de la editorial, o las de algún especialista reconocido como Martínez de Sousa.
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La corrección de estilo busca que el texto sea comprensible, fácil de leer, coherente y adecuado al tipo de público al que va dirigido. Trata aspectos que no se consideran estrictamente errores, pero que atentan con el fin último de cualquier escrito: comunicar. La denominación corrección de estilo no es muy afortunada, ya que el estilo no se corrige. La voz del autor, su forma de escribir, es única y debe respetarse. Un buen corrector de estilo mejora y da esplendor al texto, pero no se apodera de él; corrige lo que hay que corregir y nada más. Para ello, además de enmendar las faltas ortográficas y gramaticales realiza las siguientes tareas, entre otras: 
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- Elimina las repeticiones, los vocablos innecesarios, las muletillas...
- Se asegura de que el vocabulario sea el más preciso para transmitir la idea del autor y de que sea rico y variado. 
-Corrige las oraciones o ideas inconclusas y las ambigüedades. 
-Cuida las oraciones y los párrafos para que tengan una extensión apropiada y equilibrada. 
-Estructura el texto mediante una puntuación adecuada. 
-Ordena los elementos de las oraciones que no se comprenden bien. 
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Así como comparamos la corrección ortotipográfica con la limpieza superficial de una casa, la de estilo es profunda. 
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En La Máquina De Escribir nos importa la calidad, si tienes un proyecto casi completado no descartes la opción de contratar nuestros servicios de corrección, el manuscrito adquirirá sin duda un valor diferente y sobre todo le aportarás un acto cuidadoso o puntilloso, el que sin duda merece.