PERSPECTIVA
La Máquina De Escribir produce Perspectiva, un largometraje documental que trata el tema de la vida después de la muerte.
En Perspectiva experimentamos el mundo de la interpretación desde otro punto de vista. Cazamos personajes en si mismos introduciéndonos en un pueblo profundo de España "Cartaya". Captamos a diferentes personas que nunca se han dedicado al mundo de la interpretación y las convertimos en estrellas de cine. Buscamos la naturalidad de la propia vida, mientras transformamos el documental en película de ficción sobre la marcha. De igual modo experimentamos el mundo del guion, dando espacio a la improvisación en la mayoría de las escenas, rigiéndonos por un tema principal inamovible mientras ejecutamos escenas de ficción a su vez que retratan la vida real. En este caso, Pedro, el protagonista de nuestro largometraje se convirtió de manera espontánea en el personaje principal mientras vigilaba la entrada de una de las localizaciones mientras rodábamos. La curiosidad sobre el proyecto que estábamos realizando le cautivó y a los pocos segundos ya se había convertido en la estrella primera del largometraje. Causalmente Pedro se encontraba en un momento crítico en la vida tras el fallecimiento de sus padres. Estaba inmerso en una soledad angustiosa, lo que le estaba provocando una depresión aguda y profunda. El propio universo se encargó de darle a Pedro el papel de su propia realidad, para poder sanarse en el proceso de rodaje.
En Perspectiva no hacemos otra cosa que reflejar la cruda realidad de Pedro en un momento muy delicado de su vida mientras sus respectivos amigos y conocidos del pueblo tratan el tema de la vida después de la muerte. La película salvó a Pedro y Pedro salvó a la película. El experimento de hacer un largometraje de la mano del universo es fascinante, te das cuenta de que nada es casualidad sino causalidad y no hay mayor maestro que el universo para aprender de cualquier arte. Podemos concluir que este experimento cinematográfico es enriquecedor y nuestra principal reflexión es que no es necesario encerrar todo en un mismo frasco con la tapa a presión, a veces es mejor dejar la tapa abierta para que entre quien tenga que entrar.
El universo se encargará de este modo de convertir el caos en orden.